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Por: RELASER

Intercambiar experiencias, conocimientos y casos de éxito es fundamental para fortalecer los Servicios de Extensión Agropecuaria. Por esta razón, el Foro RELASER Colombia organizó un ciclo de conversatorios titulado “Sistemas oficiales de extensión rural en América Latina y el Caribe”, un encuentro que permitió compartir aportes valiosos desde México, Argentina y Chile, que sirvan como insumos para fortalecer su implementación. 

La apertura del conversatorio estuvo a cargo de María Auxiliadora Briones, de RELASER, quien manifestó que: “La reflexión, el análisis y la convergencia conjunta de la extensión es lo que fortalece a los sistemas nacionales de extensión. La actualidad nos exige muchos retos en seguridad alimentaria, agroexportación y nutrición, y la extensión es un factor dinamizador de una agricultura que haga frente a esos desafíos”. 

A continuación, un resumen de los casos que se abordaron en este primer evento, que se realizó el 4 de noviembre de 2022:

Argentina: el INTA, innovación al servicio de la extensión

El ingeniero agrónomo Julio César Catullo presentó el caso del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria - INTA, que nació en 1956 para impulsar el desarrollo de la investigación y extensión agropecuaria. No obstante, su trayectoria ha ido cambiando y adaptándose a cada contexto, para responder a las necesidades de las y los productores. 

Actualmente, el INTA tiene entre sus principales objetivos el promover la investigación y el desarrollo, así como la extensión y la transferencia de conocimientos, para contribuir a a la dinamización de espacios para el intercambio de información, impulsando procesos de innovación. De esta manera, se involucra de forma activa y participativa a las y los productores: se intercambia información valiosa con ellos/as, y se aprende de ellos/as. 

Una de las principales ventajas de este modelo, afirmó María Isabel Paredes del Comité Ejecutivo de RELASER, es que se mantenga la continuidad de los programas y los objetivos del INTA incluso en medio de los cambios políticos y económicos, garantizando un apoyo y un compromiso a largo plazo. Además resaltó su potencial de innovación: “Ir cambiando según las distintas perspectivas y tendencias es fundamental para estar vigentes y responder a problemas reales”, dijo.

México: heterogeneidad y necesidad de articulación

Jorge Aguilar Ávila, ingeniero agrónomo de México, presentó el caso de su país, que plantea múltiples oportunidades, pero también muchos obstáculos. A diferencia del caso de Argentina, los cambios de Gobierno son “borrón y cuenta nueva respecto a los sistemas de extensión”, por lo cual existe una gran heterogeneidad, múltiples análisis, pero poca acción para plantear respuestas realmente eficaces. Si bien actualmente en México existe una ley para la implementación de los Servicios de Extensión Agropecuaria, “tener una ley es una condición necesaria pero no suficiente para que realmente se den los vínculos necesarios entre los componentes de los sistemas de innovación y de extensión”, sentenció Aguilar. 

Sin embargo, se han presentado distintas experiencias exitosas de impulso de innovación a través de los servicios de extensión, como la implementación de las ‘Comunidades de aprendizaje campesino’, con las que se busca impulsar los sistemas agroforestales. El desafío, según Aguilar, está en pasar de un sistema lineal a un sistema colectivo: es decir, dejar de mirar al productor/a como a alguien que solo va a recibir conocimiento, teniendo en cuenta que el extensionista no necesariamente es la fuente única y principal de ese conocimiento. 

Según participantes del foro RELASER Colombia, el caso de México comparte elementos comunes con el caso de Colombia. Al tener una baja continuidad -que se renueva y actualiza con cada cambio de Gobierno-, este tiene menor capacidad de atender a los territorios de forma eficaz. Estas experiencias son lecciones aprendidas muy valiosas para los Servicios de Extensión Rural en ambos países. 

Chile: extensión para fortalecer la agricultura familiar

Para Francisco Aguirre, ingeniero agrónomo, consultor de la FAO y ex secretario ejecutivo de RELASER, en Chile, los servicios oficiales de extensión están enfocados en la agricultura familiar, pero esto plantea un problema: la dificultad de identificar cuál es la población objetivo que se ve beneficiada. El Instituto de Desarrollo Agropecuario – INDAP, que centraliza estos esfuerzos, tiene una cobertura muy importante, pero canaliza su presencia en los territorios a través de las municipalidades, que son quienes tienen contacto directo con las y los productores.

A pesar de los retos, el caso de Chile tiene un factor diferencial, y es su capacidad de adaptación: “El INDAP ha demostrado que las soluciones generales no sirven. Tiene que haber cambios según las necesidades culturales y agrológicas”, resaltó Aguirre. Sin embargo, afirma, es fundamental fortalecer más la conexión entre extensionistas y agricultores.

Por último, al tener un enfoque tan fuerte en la agricultura familiar, es fundamental garantizar la inclusión de jóvenes en el proceso a través de incentivos para que puedan quedarse y vivir del campo, para hacer frente al relevo generacional.

Tras compartir estos casos, se realizó una sesión de preguntas y respuestas, donde una de las principales conclusiones provino de Catullo, quien afirmó que hay una tensión permanente respecto a lo que se considera como extensión, y cómo esta debe adaptarse a las innovaciones: “Yo creo que tenemos que fortalecer, al menos en mi país,  las capacidades y habilidades de extensión para contribuir en un modelo de cocreación donde todos tengan algo para aportar”.

Asimismo, respecto a la inclusión de jóvenes en el campo, afirmó que este concepto también tiene que renovarse: “El joven no es rural ni es urbano, es una mezcla: viven en la ciudad y trabajan en el campo. Hay que entender y generar conocimiento para poder atraerlo al campo, pero entender que hay también una conexión con la ciudad: tenemos que adaptar nuestras estrategias a esa dinámica cultural”, concluyó.

Este espacio fue posible gracias a los integrantes del Foro RELASER Colombia: la Corporación Colombiana de Investigación Agropecuaria AGROSAVIA, Universidad de la Salle, ElInstituto Interamericano de Cooperación para la Agricultura IICA, La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura FAO, Federación Nacional de Ganaderos FEDEGAN, Red de Jóvenes Rurales y la RedLatinoamericana Interinstitucional Potenciando las Juventudes Rurales.

Revive el conversatorio aquí: https://www.youtube.com/watch?v=GQDmygdecL0