banner relaser home con drone

San Ramón, Costa Rica. El pasado 31 de octubre de 2024, la finca La Loma, ubicada en el Colegio Técnico Profesional Nataniel Arias Murillo, fue el escenario de una jornada educativa organizada en el marco del Proyecto AERAS. Este proyecto, respaldado por la Comisión Europea y la Cooperación Belga al Desarrollo, busca promover sistemas agroecológicos sostenibles en la región, fortaleciendo las capacidades locales y fomentando el uso de bioinsumos en la producción agropecuaria.

La actividad fue parte de las Comunidades de Práctica (YCoP) de los fellows de YPARD que participan en el proyecto AERAS, con el objetivo de difundir la importancia de la agroecología dentro de los sistemas agroalimentarios. Además, se destacó la integración de jóvenes en estos procesos, un esfuerzo clave frente a la problemática del relevo generacional en la producción agrícola.

El evento, dirigido a estudiantes de las especialidades de agroecología y producción agrícola pecuaria, tuvo como propósito principal sensibilizar a los participantes sobre los beneficios ambientales y económicos de los bioinsumos. Durante la jornada, se exploraron conceptos clave como los microorganismos de montaña y el lombricompost, subrayando su importancia en la mejora de la salud del suelo, la reducción de costos de producción y la promoción de prácticas respetuosas con el medio ambiente. La profesora de producción agrícola, Yuri Madrigal, expresó: “El propósito principal de esta charla fue despertar en los estudiantes el interés por la producción sostenible y motivarlos a implementar prácticas que no solo mejoren la calidad del suelo, sino que también aseguren la sostenibilidad ambiental a largo plazo.”

Entre los momentos destacados del evento, se incluyó una introducción a los bioinsumos, donde los estudiantes conocieron las ventajas de utilizar biofertilizantes, biopesticidas y bioestimulantes como alternativas a los químicos convencionales. Además, se realizó una demostración práctica en la que los participantes elaboraron un bioinsumo sólido a base de melaza, concentrado animal y agua, siguiendo el método práctico de “aprender haciendo”. También se llevó a cabo un taller sobre lombricompost, en el que se explicó el papel de las lombrices en la transformación de residuos orgánicos en compost de alta calidad, destacando esta técnica como una opción económica y de gran impacto ambiental.

Cabe resaltar que esta actividad fue un esfuerzo conjunto entre clústeres: Alejandra Rodríguez, fellow del clúster de Fundecor (Fundación para el Desarrollo de la Cordillera Volcánica Central), lideró el evento junto a Laura Valenciano, formadora del clúster del Instituto Tecnológico de Costa Rica, quienes aportaron sus experiencias y conocimientos en la promoción de prácticas agroecológicas.

Además de sensibilizar a los estudiantes sobre la producción sostenible, el evento estableció las bases para futuras iniciativas en la finca educativa del colegio. Entre estas acciones destaca la implementación de una biofábrica para reproducir microorganismos de montaña, que serán utilizados en las prácticas agropecuarias de los estudiantes, reforzando su aprendizaje y compromiso con la sostenibilidad ambiental.

Este tipo de actividades refleja el compromiso del Proyecto AERAS y sus aliados, como RELASER y GFRAS, de formar una nueva generación de productores conscientes, preparados para liderar la transición hacia una agricultura más resiliente y respetuosa con el medio ambiente.